'Durante el día, haz frecuentes ofrendas de ti mismo a Dios...diciendo: aquí estoy Señor, haz conmigo lo que quieras. Dime qué quieres que haga por ti, Y lo haré todo.
Repite, tan a menudo como puedas, actos de amor por Dios.
Santa Teresa solía decir que los actos de amor son como la madera manteniendo el fuego del amor divino encendido en nuestros corazones...
Si caes en algún pecado, humíllate al momento. Cuando te pasa algo que no te agrada, ofrécelo a Dios inmediatamente por un acto de conformidad con su santa voluntad.
Adquiere el hábito de siempre repetir
en circunstancias adversas las palabras:
Tal es la voluntad de Dios y tal también es mía '
San Alfonso de Liguori
Viernes 05 de Octubre del 2018
1 comentario:
Querida hermana.Si,hay que tirar frecuentemente leña al fuego del amor para que no se extinga.El día esta lleno de oportunidades para ofrecer servicios,perdonar ofensas,callar quejas,ofrecer sufrimientos y rezar jaculatorias. Si la llama se mantiene viva nos ilumina y vemos con claridad la voluntad de Dios.
En el evangelio de hoy Jesús nos dice que si lo hacemos así somos bienaventurados.
Muchas gracias por estas palabras tan luminosas.
Un fuerte abrazo
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