«...Olvidando lo que deje atrás y esforzándome por alcanzar lo que está delante, sigo avanzando hacia la meta...». (Filipenses 3:13)
El camino que queda atrás debe ser olvidado: no más arrepentimientos inútiles, no más 'si solo', ninguna complacencia sobre las riquezas espirituales que hemos acumulado.
En la presencia de Dios, siempre somos siervos indignos, pecadores perdonados, hombres pobres. No debemos cerrar nuestras manos en un espacio vacío, sino mantenerlas abiertas hacia el Señor para recibir la generosidad de su amor. Somos hijos e hijas en la medida en que nacemos de Dios; y nacemos desnudos.
El poder del olvido es muy importante. Nos permite liberarnos de los resentimientos y las marcas de honor, las impurezas y las cargas externas de nuestro pasado, para mantener solo lo que está inscrito en la esencia de nuestro ser, a través del cual somos lo que somos ahora. Así sin carga, podemos avanzar, ágil y desapegados, esforzándonos con todos nuestras fuerzas hacia nuestro fin, de una manera que deje atrás todos los logros, sin detenerse nunca en esta vida: "Atráeme; en pos de ti y corramos juntos, vayamos de prisa" (Cantar de cantares 1: 4). Cristo siempre está delante de nosotros. . .
Consciente mente, y con un abandono que es completamente confiado, me abro a esta vida y amor que, en Dios, son eternos: la acción creadora de Dios, en Dios, es Dios mismo. Sus resultados tienen lugar con el tiempo. Cada momento presente me vincula con la eternidad, me lleva en el Hijo hacia el Padre en el amor del Espíritu Santo. Ese momento se enriquece con el pasado y lleva el futuro dentro de sí mismo en la medida en que me entrego a él con fe. Olvidando el pasado, me esfuerzo por alcanzar la meta, dejándome llevar por el movimiento del presente.
Es precisamente la realidad de mi participación presente en la vida de Dios la que, al cumplirme, enciende mi deseo y lo orienta hacia su fuente. Me oriento por el olvido, por la pobreza de mis manos vacías. Me elevo hacia arriba por medio de mi deseo. Cada momento es un comienzo absoluto. Me acepto a mi mismo completamente de nuevo, y me entrego totalmente sin condiciones. La alegría de mi gratitud, y mi alabanza por el amor y la misericordia de Dios que me envuelven, son todos juntos el canto de mi creación ".
(Por un Cartujo)
Miércoles 20 de Febrero del 2019
8 comentarios:
Precioso Eugenie, ese vivir en comunión íntima con Cristo, en su Paz, es una meta diaria a alcanzar. Mamá María nos ayuda.
Un abrazo fraterno
Es muy importante lo que dices hermana, olvido, perdón...
Son los caminos del amor, nacer cada día de nuevo, renovada
transformada, en El, olvido lo que quedó atrás, me lanzo
hacia adelante,siento el gozo de su llamada, de la vida
que cada día me ofrece, gozo, me abandono, El me lleva,
¡Que temer!
Gracias Eugenie. Dios te bendiga y te cuide.
Un fuerte abrazo.
Quien cree y ama se convierte de este modo en constructor de la verdadera “civilización del amor”, de la que Cristo es el centro, gracias, por su sencillez y su vida de oración un fuerte abrazo.
Que tengas buena semana
Ojalá el amor de Dios llegue a todos los corazones que lo desconocen y sepan amar y respetar a su prógimo.
Gracias por tu visita.
que tengas feliz semana.
Muchas gracias querida hermana por acordarse de mi y rezar por mi familia.
Que Dios se lo pague.
La reflexión que nos ofrece hoy es preciosa y llena de paz nuestra alma.
Lo pasado,pasado esta.Los errores cometidos el Señor ya los ha perdonado y a mi me han servido para estar más vigilante y más unida a Él.La unión con el Señor es imprescindible para poder ser buena cristiana.
Cada día le doy gracias a Dios por su amor sin medida;yo nada soy y nada puedo, pero unida a Él me siento fuerte y segura.El Señor nunca nos abandona y con su ayuda todo se puede pasar en paz.Bendito sea
Gracias por su apoyo y oración.
Un abrazo
Con todo gusto querida Carmen.
Entre otras cosas, quería comentarte que tal vez los comentarios hechos por medio de google+ y no directamente de blogger se borren a partir del 2 de Abril. Eso fue lo que entendí en la información que me enviaron. Te lo digo, por si tus comentarios se llegan a borrar. (sucederá automático) Tal vez si comienzas a comentar directamente de blogger sin usar google+
¿Quizás ya estas también enterada?...
Muchas gracias, querida amiga y hermana. Muy unidas en Jesús y María. Un fuerte abrazo, Carmen
Querida hermana Bienaventurada, me da mucha pena, pero en accidente borre tu comentario después de publicarlo. Estaba tratando de controlar el siguiente post y pensé haber borrado uno mío, en vez del tuyo.
Por favor perdona mi torpeza. Lo leí e intente publicarlo de nuevo pero no aparece.
Muchas gracias por tu visita y tu hermandad.
Un fuerte abrazo.
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