"Hoy ya no estoy más en mí. Estoy con mi Dios, todo por Él, y Él todo en mí y para mí, Jesús está conmigo, Él es todo mío. Está solo, solo, y yo estoy solo para bendecirle, para honrarle. Él habita en la miserable celda de mi corazón y Su Majestuosidad desaparece. Estamos solos, solos, y mi corazón late continuamente con el corazón de Jesús. ¡Jesús por siempre! El corazón de Jesús y mi corazón son uno solo. No pasa un momento sin que yo sienta que su querida presencia siempre se manifiesta de la manera más amorosa. Y en otra ocasión: "¡Oh, qué preciosos momentos son estos! Es una delicia que solo se puede comparar con la bienaventuranza celestial de los Ángeles y los Santos. Sí, estoy feliz, porque siento mi corazón latir con el de ellos. Estoy feliz porque te poseo, oh Jesús. ¡Oh Jesús, con qué alegría me llena saber que te poseo! Pero, Dios mío, si así tratas con nosotros en la tierra, ¿cómo será en el cielo?"
~Santa Gemma Galgani
Mayo 09 del 2018
No hay comentarios.:
Publicar un comentario